Quieres una tabla que vaya bien cuando las olas están normales, pero que también rinda cuando llega ese día perfecto: la marea justa, el viento correcto y ese swell que empieza a bombear sobre ese pequeño sand bank que se ha formado en tu spot local.
La X-RAY por fin llena ese vacío siempre esquivo en tu quiver… incluso cuando no tienes quiver.
Con un poco más de área en el nose que una shortboard estándar y un outline suave y limpio sin interrupciones hasta el squash tail pod, ofrece un equilibrio perfecto gracias a su medium rocker que fluye desde el nose hasta el tail. Esto permite surfear la tabla como lo que es: la shortboard todoterreno definitiva para destrozar olas a diario.






